Fiel a la tradición, ayer trajo la empresa el segundo fascículo de su propuesta de mayor flexibilidad, con unas primeras pinceladas edulcorantes sobre la edición original, pero remarcando a continuación el “coste” que ello supone… NO A LA PLANTILLA, SINO A MICHELIN!!
Por esta vez, renuncia a costear la prolongación de aperturas a la baja a cuenta de los pluses festivo y nocturno, sustituyéndolo por deuda de hasta 7 jornadas en el 5x8 y de hasta 9 jornadas en el 4x8. También reduce de 261 a 265 días la apertura mínima del 4x8, amplia de 15 a 30 días el preaviso en caso de modificación de apertura a lo largo del año y delimita el margen de variación de apertura anual del nuevo 3x8 variable en 11 días al alza y 18 a la baja.
CGT hemos rechazado esta y cualquier otra medida que, se quiera maquillar como se quiera, suponga abaratar y profundizar en la flexibilidad a la carta que ya venimos sufriendo, en este caso reduciendo e incluso eliminando los pluses de sistema, incrementando la deuda con cargo al bolsín y dificultando aún más nuestra conciliación con más días de regularización de saldo negativo y posibles cambios de sistema y calendario en un mismo año.
La Dirección de MEPSA quiere ponerse una nueva medalla ante Clermont-Ferrand, en el marco de la estrategia de esta última de
fomentar una competitividad cada vez más agresiva entre fábricas, subastando las mayores inversiones y volúmenes productivos al mejor postor.
Aunque ello suponga destruir empleo en aquellas fábricas con mejores condiciones laborales y precarizarlo en aquellas que nos estamos convirtiendo en el destino low-cost de toda esa producción deslocalizada.
Flexibilidad es sinónimo de precariedad, y exigirnos mayores esfuerzos por “mantener la confianza del Grupo” no es sino una manera retórica de decirnos que “sigamos bajándonos los pantalones”. Así le ha ido muy bien a Michelin,
aprovechando cada situación de crisis para generar incertidumbre y amenazar con el empleo, al objeto de negociar concesiones con los sindicatos de siempre, para así poder ir aumentando su suculento margen de beneficios.
Desde esta sección sindical hemos recordado a la empresa los múltiples mecanismos de flexibilidad con los que ya cuenta, los casi 500 puestos de trabajo perdidos desde la firma del acuerdo de flexibilidad y “salvaguarda del empleo” de 2013 y el peso cada vez mayor de MEPSA en el beneficio neto aportado a nivel de Grupo, al tiempo que
le hemos instado a que sus excelentes resultados económicos empiecen de una vez a materializarse en la mejora de las condiciones de vida y de trabajo de quienes sufrimos día a día a pie de máquina.
Salud, acierto y dignidad
Valladolid, 1 de abril de 2022