Después de España y la reforma laboral del PP les toca el turno a nuestros vecinos del norte, Francia.
La ministra de empleo Francesa ha copiado partes enteras de la destructiva reforma laboral del PP, esa que nos ha condenado a trabajar más por menos, esa por la cual nos despiden más barato que nunca, pagándonos nosotros mismos nuestro despido por medio del FOGASA.
Y se ha dispuesto a aplicarla en Francia con el respaldo del PSOE francés y el partido republicano (PP francés) alentada desde Bruselas y Berlín, tal y como ocurrió en España, amparándose en una mayoría en el congreso y ante la presión de las multinacionales.
La reacción de la clase trabajadora francesa no se hizo esperar y tras convocar una huelga general a finales de Marzo, seguida masivamente, reprimida y no escuchada por el gobierno, se ha continuado con movilizaciones y manifestaciones convocadas desde los sindicatos de trabajadores y estudiantes franceses, con paros totales en universidades e Institutos. Siendo cerrados los campus universitarios de Paris, Marsella, Lyon y Burdeos para impedir las asambleas de estudiantes en su interior.
La autoorganización obrera en las grandes capitales Francesas y barrios de París no han parado desde la imposición de esta reforma laboral a la española, y no pararán hasta tumbarla. El estado Francés títere de las multinacionales utiliza la policía pagada con los impuestos de los obreros para perseguir y detener a todos aquellos que intentan luchar por una vida digna.
Vemos como el asalto a las condiciones de vida de los obreros está desarrollándose por toda Europa, vemos como las reformas no van destinadas a acabar con el paro, si no a crearlo, a robarnos cada vez más y a golpearnos y apalearnos si nos quejamos.
Hoy más que nunca es necesario tomar conciencia de la deriva que llevan nuestras vidas y organizarse para pelear contra la barbarie del capital. Un ente que jamás se dará por satisfecho y contra el que debemos luchar con todas nuestras fuerzas.
Es imposible no darse cuenta, como hoy en día las multinacionales manipulan gobiernos para cambiar leyes y marcos legales para permitirles cada día exprimirnos más, condenándonos a una vida de miseria, apatía y derrota.
Reformas laborales, leyes mordaza, TTIP, desahucios, destrucción del medio ambiente, robos a manos llenas de la gente que ostenta el poder, el sistema está enfermo y tiene una sola cura que es recuperar la conciencia de clase trabajadora y organizarnos para defendernos, aquí, en Francia y allá donde el capital, ese ente explotador atente contra nuestras vidas.
No debemos someternos a los abusos del capital.
No somos mercancía
Valladolid a 16 de mayo de 2016